El pequeño de 2 años que espera un corazón internado en el Hospital Garraham, sigue luchando por vivir conectado a un corazón artificial, desde hace cuatro meses. Las emotivas palabras de su madre.



Su mamá Belén Ramos contó que Renzo está muy bien de ánimo, "continúa recuperándose de la acv, se ríe y está charlatán".

El período de adaptación al aparato que le permite vivir hasta que llegue un órgano, es de 2 a 3 meses, él lo pasó :"Ya sabe como moverse, corre solito los cables, está comenzando a hablar y a pedir para ir al baño" dijo Belén.

Cada día que pasa es una oportunidad para Renzo, pero también es duro "estoy felíz porque tengo mi hijo vivo y él la pelea. Hay días que la espera te frustra, te cansa, tenés ganas de irte. Muchas veces se me pasa por la cabeza, que pasaría si Renzo estuviera sano y la impotencia de no poder hacer nada" agregó esta madre coraje de 24 años.

Confesó que no tiene tiempo para llorar porque sólo lo deja solo cuando las enfermeras lo curan o lo ven los médicos. Al principio sí pensé porqué nos pasará esto, pero supe que él nos eligió como sus papás para esta pelea tan difícil, y seguimos" dijo Belén.

"Sueño todo el tiempo que aparece un corazón para Renzo - agrega- cuando vienen los médicos a ver algún paciente tengo esperanzas, cuando se van sin decirme nada me queda cierta frustración, es una lucha dolorosa, pero estamos muy contenidos y el amor que le envían a Rensito, le llega porque está radiante" aseguró en diálogo con Sudamericana.


Jueves, 7 de marzo de 2013